En Agile Not Consulting, nuestra experiencia en la implementación de la agilidad abarca tanto el ámbito del software como otras áreas. En este caso, nos embarcamos en un nuevo desafío: implementar la agilidad en la gerencia de una gran empresa, compuesta por profesionales de diversas áreas como comunicaciones, sostenibilidad, ciudadanía y asuntos corporativos.
Desafíos:
Colaboradores con diferentes formaciones: Periodistas, ingenieros, sociólogos y psicólogos, con escasa familiaridad con las metodologías ágiles.
Transformación cultural: Implementar un enfoque Lean-Agile en una gerencia con una cultura tradicional.
Estrategias:
Definición del propósito: Aclarar el objetivo de la transformación, basado en la necesidad de aumentar la entrega de valor al cliente y la capacidad de adaptación.
Acompañamiento estratégico: Realización de dos evaluaciones (lean-agile y barómetro de salud de los equipos) para identificar oportunidades de mejora.
Planificación estratégica: Implementación de OKR (objetivos y resultados clave) compartidos para alinear la visión de la gerencia.
Desarrollo de capacidades: Incorporación de un especialista para el acompañamiento operativo y la creación de workshops y capacitaciones.
Aprendizajes:
El liderazgo como factor clave: El compromiso y la conexión de los líderes son fundamentales para el éxito de la transformación.
Importancia de la conexión humana: Fomentar espacios de interacción y conocimiento mutuo entre los miembros del equipo.
Adaptación a diferentes estilos de aprendizaje: Considerar las diversas formaciones y experiencias de los colaboradores.
Evitar recetas mágicas: No existe una solución única para la implementación de la agilidad, cada caso requiere un enfoque personalizado.
Pilares de la agilidad: Transparencia, inspección y adaptación son esenciales para ajustar el proceso a las necesidades del cliente.
La transformación hacia la agilidad, aunque aún en curso, ha comenzado a generar cambios positivos en la gerencia. Se observa una mayor centralización en el cliente, un uso más efectivo de las herramientas ágiles y una cultura más abierta a la adaptación. El liderazgo ha sido un factor determinante en este proceso, y la clave para el éxito continuo será mantener la flexibilidad y la capacidad de ajustar la estrategia a las necesidades emergentes.
Escrito por César Machado
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